¿Qué es la degradación ambiental?
La degradación ambiental es el deterioro del medio ambiente producido por el agotamiento o deterioro de recursos como el aire, el agua y el suelo, o por la contaminación o destrucción de los diferentes ecosistemas y hábitats.
El resultado, un impacto negativo en el planeta.
Por tanto, la degradación del medio ambiente o degradación ambiental es un problema global que afecta a todos los seres vivos en nuestro planeta. La emisión de gases de efecto invernadero, la contaminación del aire y del agua, la deforestación y la extinción de especies son solo algunos de los efectos negativos del uso irresponsable de los recursos naturales.
Cómo mitigar la degradación del medio ambiente
Sin embargo, existe una solución para combatir los problemas ocasionados por el deterioro o degradación del medio ambiente: el uso de energías renovables.
Las energías renovables son aquellas que se obtienen a partir de fuentes naturales inagotables, como el sol, el viento, la biomasa, la geotermia y las olas. A diferencia de los combustibles fósiles, no emiten gases de efecto invernadero y no contaminan el medio ambiente. Además, son una opción más segura y sostenible en términos de reservas y aprovechamiento.
La energía solar es una de las más utilizadas en todo el mundo. Los paneles solares convierten la luz del sol en electricidad mediante el uso de células fotovoltaicas. Esta tecnología es cada vez más eficiente y accesible, lo que la convierte en una opción atractiva para hogares y empresas.
La energía eólica también es una fuente de energía renovable en aumento. Los aerogeneradores son capaces de convertir la energía del viento en electricidad mediante el uso de turbinas. Además, los parques eólicos son una excelente opción para generar electricidad en áreas rurales y remotas.
La energía hidroeléctrica también es una de las más utilizadas en todo el mundo. Consiste en la generación de electricidad a partir de la energía cinética de las aguas. Es especialmente útil para países con ríos y cascadas, ya que estos proporcionan energía renovable a bajo coste.
Además de reducir la emisión de gases de efecto invernadero, el uso de energías renovables tiene otros beneficios para el medio ambiente. Por ejemplo, los parques solares y eólicos son espacios naturales donde se pueden encontrar distintas especies de animales y plantas.
También, la producción de biocombustibles a partir de cultivos como la caña de azúcar y la remolacha se está convirtiendo en una alternativa sostenible al petróleo. Estos cultivos pueden ser producidos en tierras marginales, lo que reduce la presión sobre las tierras fértiles y los bosques.
La energía geotérmica también es una fuente de energía renovable con un gran potencial. Se basa en la utilización de la energía calorífica del interior de la Tierra para generar electricidad. Es especialmente útil en áreas con una actividad geotérmica elevada, como Islandia.
El uso de energías renovables también tiene un impacto positivo en la economía local y en la creación de empleo. Por ejemplo, los parques eólicos y solares suelen ser propiedad de pequeñas y medianas empresas, lo que fomenta la competencia y el desarrollo económico. Además, la instalación y el mantenimiento de estos sistemas requieren de un gran número de trabajadores especializados.
Sin embargo, aunque el uso de energías renovables es una solución esencial para combatir la degradación ambiental, todavía hay desafíos que superar. Por ejemplo, la intermitencia de algunas fuentes de energía renovable, como la energía solar y eólica, puede dificultar su integración en el sistema eléctrico. Además, el almacenamiento de energía a gran escala todavía es un desafío técnico y económico.
En conclusión, el uso de energías renovables es una solución esencial para combatir la degradación ambiental. A medida que se desarrollan nuevas tecnologías y se reducen los costes, estas fuentes de energía se vuelven cada vez más accesibles y atractivas. Es importante que las empresas y los gobiernos inviertan en investigación y desarrollo en esta área.
Ejemplo de empresa de éxito en el ODS 7
Un ejemplo de empresa española que permite trabajar de forma eficiente el ODS 7 es ARPA, quien ha creado la tecnología solar híbrida más eficiente del mundo.
ARPA ha desarrollado un sistema 2 en 1 que permite la producción de energía térmica y eléctrica a base de placas solares híbridas.
Estas placas se instalan en la cubierta del edificio captando la energía del sol y convirtiéndola de manera simultánea en energía eléctrica y térmica utilizada para el autoconsumo, tanto en los sistemas de climatización como en los eléctricos de las instalaciones de producción.
Las soluciones de Arpa Change se podrán implementar en industrias, hospitales, granjas, hoteles, centros deportivos, colegios, cuarteles o residencias, entre otras.